La actriz, y futura cantante, se escapó a Villa La Angostura para esquiar en el Cerro Bayo y comer chocolates ● Lejos de su novio, le mandaba mensajes y fotos para sufrir un poco menos su ausencia .
Villa La Angostura es un paraíso natural. Un regalo de Dios a la vista y al resto de los sentidos. Todo el año es bellísimo, pero es en invierno cuando los paisajes se vuelven definitivamente increíbles. Desbordante de nieve, el cerro Bayo invita a los visitantes más jóvenes a deslizar sus habilidades para el esquí sobre el manto blanco.
Allí, cuando el frío aprieta y se hace sentir en la piel y en los huesos, los chocolates de Milka ayudan a combatirlo. Hay de todas las formas y para todos los gustos: en rama, en barra, blancos, negros, amargos o muy muy dulces. Son, todos, de un sabor extraordinario.
Parece difícil que alguna situación pueda entorpecer un paseo por estas latitudes con preciosuras y exquisiteces semejantes tan a la mano. Más que difícil, parece imposible. Pero no. Porque Lali Espósito (22), que pasó unos días entre los picos nevados y los bocados de chocolate, sufrió la ausencia de su novio, Benjamín Amadeo (29). "Me encantó la nieve. ¡Es muy lindo el lugar! Y los chocolates que comí en la cabaña de Milka ni te cuento. Uno mejor que el otro. Ja, no quise comer más para no engordar. Pero me faltaba Benjamín, y lo extrañé un montón. Le mandé muchos mensajes, fotos y hablamos, pero no es lo mismo".
Lali y Benja no tienen planes de convivencia... por ahora. "Dormimos un poco en la casa de uno, un poco en la del otro. Nos gusta contar con nuestro espacio. Con dos casas es equilibrado. Así que por ahora no pensamos en vivir juntos", dijo ella. Claro, antes de extrañarlo tanto. ¿Ahora pensará lo mismo?
